El funcionamiento de las etiquetas electrónicas de ETE es muy sencillo: se vuelca la oferta gastronómica del buffet en el sistema, se asigna la información a cada etiqueta electrónica hasta donde se transmite mediante Bluetooth 4.0 encriptado y de manera automática a la hora establecida.
Esta tecnología, además de ahorrar tiempo, evita errores humanos y permite ofrecer mejor atención a los huéspedes. Entre otros ventajas dinamizan la comunicación con el cliente mostrando la información en diferentes idiomas y de forma gráfica (especialmente relevante para los alérgenos).
Además, mejoran la imagen de buffet dándole un aspecto moderno y unificado mostrando el logotipo del hotel cuando están desactivadas.