Aquí van dos propuestas que prometen “hechizar” a quienes las prueben:
“El Capricho de Samhain” en Cremela
Cremela presenta para este helado de chocolate blanco con infusión de frutos rojos, bizcocho y coulis de moras con achiote.
El nombre rinde homenaje a Samhain, el antiguo festival celta que marcaba el final de la cosecha y el inicio del invierno, considerado el origen de la actual celebración de Halloween, y une lo mejor de ambas tradiciones —la mística celta y la creatividad moderna— en un bocado lleno de sabor, color y simbolismo.
Burbujas del Sella y su delicioso menú de Halloween para disfrutar bajo las estrellas
En el norte, la magia de Halloween se vive bajo un cielo infinito y Burbujas del Sella celebra estas noches especiales con un menú diseñado por el chef Bruno Lombán (con un sol Repsol en su restaurante Quince Nudos).
El menú comienza con Aperitivos de bienvenida, seguidos de Boletus y trompetas en su guiso, un Escabeche templado de lubina salvaje con cítricos y hierbas costeras, y una Carrillera de ibérico glaseada sobre calabaza asada. El cierre llega con un semifrío de Idiazábal, membrillo y crujiente de miel y todo está maridado con Champagne Lanson Le Black.
Una propuesta gastronómica para disfrutar bajo el cielo y que sirve para ensalzar esta experiencia única, en un entorno donde la naturaleza, el silencio y las estrellas se convierten en los verdaderos protagonistas.
Burbujas del Sella invita a quienes buscan una escapada diferente a vivir la noche de Halloween entre el lujo y la calma: dos suites de 50 metros cuadrados, distribuidas en tres cúpulas transparentes, desde las que se disfrutan vistas panorámicas al cielo nocturno y un magnífico paisaje verde durante el día.