por 
< Volver

Según Fernando Vázquez, socio consultor en ERA Group, contener gastos mediante la revisión de contratos, la gestión estratégica de proveedores y la estandarización de servicios se convierte en clave para proteger la competitividad y mantener márgenes operativos.

La presión inflacionista ha regresado con fuerza este verano. Junio de 2025 ha traído subidas récord en sectores clave como el alojamiento, los vuelos y los alimentos básicos. Lejos de tratarse de una variación estacional, este encarecimiento generalizado impacta especialmente en actividades vinculadas al consumo y la movilidad.

En hostelería, los incrementos del 30% en alojamiento y del 22% en vuelos nacionales encarecen la experiencia del cliente y elevan los costes logísticos, de aprovisionamiento y de personal. Las empresas se ven obligadas a decidir entre asumir el sobrecoste o trasladarlo al cliente, arriesgando su competitividad. El sector alimentario, por su parte, sufre tanto por el alza de precios en materias primas como por la dificultad de repercutir esos costes a un consumidor ya ajustado. La logística también se ve afectada por la subida de carburantes, con consecuencias directas en las tarifas de transporte y los costes operativos.

Muchas compañías operan a plena capacidad, con altos niveles de facturación, pero rentabilidades más bajas. El aumento de la actividad no compensa el incremento acumulado de los costes. Esto debilita la capacidad de generar reservas en temporada alta y ralentiza decisiones clave: inversiones aplazadas, contrataciones pospuestas, tensiones de tesorería y, en los casos más sensibles, pagos a proveedores diferidos. Algunas empresas recurren a descuentos agresivos para sostener la demanda, lo que genera una aparente buena marcha comercial, pero sin base sostenible.

Conocer precios y niveles de servicio permite negociar y ahorrar costes con mayor fundamento

En este contexto, contener el gasto sin dañar la operativa exige reorganizar con criterio. La revisión rigurosa de contratos permite detectar sobrecostes y condiciones obsoletas que pueden renegociarse. Para ello, resulta esencial tener una visión clara del mercado. De hecho, conocer precios y niveles de servicio permite negociar con fundamento y tomar decisiones informadas. Además, medidas como la agrupación de compras o la estandarización de servicios generan ahorros sin afectar la calidad ni al equipo.

La gestión de proveedores cobra un papel estratégico. Un contrato bien estructurado puede amortiguar subidas de precios, y una relación sólida con el proveedor adecuado garantiza estabilidad operativa. Gestionar activamente este ecosistema permite identificar mejoras, abrir procesos competitivos y alcanzar eficiencias de entre el 10 % y el 20 %.

La inflación no se puede evitar, pero sí se puede gestionar. Las empresas que actúan con método y visión protegen su rentabilidad y ganan margen de maniobra para avanzar incluso en contextos complejos.

 

Noticias relacionadas

comments powered by Disqus

Utilizamos cookies propias y de terceros para analizar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de sus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas o videos vistos). Puedes obtener más información y configurar sus preferencias.

Configurar cookies

Por favor, activa las que quieras aceptar y desactiva de las siguientes las que quieras rechazar. Puedes activar/desactivar todas a la vez clicando en Aceptar/Rechazar todas las cookies.

Aceptar/rechazar todas
Cookies Analíticas

Cookies que guardan información no personal para registrar información estadística sobre las visitas realizadas a la web.

Cookies de Marketing

Cookies necesarias para determinadas acciones de marketing, incluyendo visualización de vídeos provenientes de plataformas como Youtube, Vimeo, etc. y publicidad de terceros.

Cookies de Redes Sociales

Cookies relacionadas con mostrar información provenientes de redes sociales o para compartir contenidos de la web en redes sociales.