Los colores tierra, la vegetación árida y la imagen envolvente del mar predominan en los interiores del alojamiento, donde materiales equipamiento y arte se funden para realzar la calidad espacial. "Con el diseño de los elementos se ha buscado potenciar el espacio tanto en su escala más íntima, con objetos de diseño y atrezo, como en la relación con el entorno, integrando y enmarcando la naturaleza", explican los responsables del proyecto.
Más lujo en las habitaciones
Aumentar el porcentaje de habitaciones de alta gama era uno de los requisitos de la propiedad, que buscaba con esta obra elevar la imagen y elementos del hotel a los estándares “The Level”, propios de la firma Meliá, "para garantizarle al turista más exigente, que busca lujo y placer, las mejores sensaciones y experiencias en el archipiélago canario".
Para ello, el equipo del estudio ha trabajado cuidadosamente el nuevo estilo y la decoración de las 290 habitaciones del hotel, el cual ya está a pleno funcionamiento desde el pasado mes de septiembre.
Intervención en el área de restaurantes
La reforma ha contemplado una profunda actualización de las zonas comunes y también la adaptación del diseño de la oferta gastronómica del hotel, que se concreta en tres restaurantes cuyas identidades de marca se basan en sus estándares propios, pero mediante su diseño se aporta igualmente carácter local y distinción:
- Casa Nostra, para cuya imagen se toma la identidad italiana, muy vinculada al mediterráneo, pero en un entorno más árido como la isla de Tenerife;
- Pico Negro, ha sido diseñado por el estudio como el primer restaurante de esta nueva marca, que aporta una nueva vivencia y estilo elegante y desenfadado.
- Mosaico es el tercer elemento de esta trilogía gourmet desarrollada por el despacho: un buffet de cocina de producto de primer nivel, que se ha replanteado para un mejor funcionamiento y confort.
